Un rompecabezas grande y colorido, donde cada pieza representa diferentes habilidades, emociones y desafíos. en el centro, hay una pieza brillante y única, iluminada por un haz de luz, que representa a una persona con autismo. alrededor de esta pieza central, hay otras que representan apoyo, amor, comprensión y paciencia, uniendo todo el rompecabezas. en el fondo, tonos suaves de azul (color asociado con la conciencia sobre el autismo) se mezclan, creando un efecto calmante. destellos de luces de diferentes colores, representando la diversidad y complejidad del espectro autista, brillan suavemente en el entorno.